La bomba hace mucho ruido y la presión es demasiado baja.

Limpie el depósito con flotador y compruebe si el tubo de aspiración está completamente libre de suciedad. Si la bomba no recibe suficiente agua, empezará a cavitar, lo que provoca un desgaste excesivo de la junta. Asegúrese de que la temperatura del agua no sea demasiado alta y de que la bomba no se obstruya con cal debido a la dureza del agua. Debe comprobarse la presión del suministro de agua, que debe ser de al menos 1,5 bar en caso de fallo total de la bomba.